Bajo la lupa
Bajo la lupa
Aprendizaje esperado: elige un tema y hace una pequeña investigación.
Énfasis: identificar diversas maneras de nombrar situaciones, objetos, personajes o características.
¿Qué vamos a aprender?
Con apoyo de los contenidos que trabajarás, conocerás cómo se pueden expresar ideas de diversas maneras para que puedas identificar este recurso al momento de hacer una lectura, y claro, puedas utilizarlo cuando escribas algún texto propio.
Como parte de este trabajo, revisarás algunos ejemplos en donde podrás observar situaciones, objetos y personajes “bajo la lupa”, con el fin de que aprendas a distinguir las diversas formas de nombrarlos en un texto, y evitar así un uso repetitivo de las palabras.
¿Qué hacemos?
Para empezar, te planteamos las siguientes preguntas:
- Al momento de leer un texto, ¿te has fijado que el autor puede referir una misma palabra o idea, pero de maneras diferentes?
- ¿Te ha pasado que tus textos suenan muy repetitivos?, ¿o que, cuando lees un texto de alguien más, se repite una y otra vez un término hasta que te aburre?, ¿qué estrategias conoces para que esto no te suceda cuando escribes?
- ¿Qué debes hacer para no repetir las mismas palabras en un texto y que no se pierda su sentido?
Si piensas con atención en las preguntas anteriores, y si reflexionas sobre tu propia experiencia, te darás cuenta de que existe cierta complejidad al realizar un texto propio o al analizar un contenido. Es muy importante considerar que al redactar se debe tener cuidado de evitar la repetición de palabras o frases, con la finalidad de que los lectores disfruten y comprendan fácilmente esos textos.
Para ello debes tomar en cuenta que, para escribir un texto, no solamente se requiere de práctica. La lectura es fundamental para enriquecer nuestro lenguaje y nuestra redacción.
Por ejemplo, un buen escritor es claro y coherente al plasmar las ideas. Incluso los textos científicos necesitan tener una redacción fluida y sencilla para que se pueda entender la información que quieren transmitir.
Por ejemplo, en las crónicas de deportes, en lugar de decir todas las veces el nombre de la deportista, dicen “la jugadora”, “la atleta”, “la seleccionada nacional”. Generalmente, cuando un concepto es importante para una comunidad, o le interesa mucho, tiene varias maneras de mencionarlo. Por ejemplo, observa la siguiente imagen y piensa en todas las maneras que conoces para nombrarla.
Podría ser:
- Casas
- Hogares
- Viviendas
- Domicilios
Existen diferentes maneras y perspectivas para referirnos a un mismo objeto. Ese lugar donde vives y que compartes con las personas que quieres es muy importante porque te protege de la intemperie y te da seguridad. Hay muchas maneras de referirnos a él.
Ahora te compartiremos otra imagen, y te pedimos que hagas lo mismo: piensa al menos tres maneras diferentes de nombrar lo que verás en la imagen.
Podría ser:
- Un joven
- Un estudiante
- Un muchacho
- Un chico
- Y si supieras su nombre, también lo podrías llamar por su nombre.
¿Ya te diste cuenta de cómo puedes nombrar algo, en este caso, un personaje, de distintas maneras, sin ser repetitivo?
Como pudiste ver, el muchacho es una persona, por eso es importante, y existen tantas maneras de referirnos a él.
Para el siguiente ejemplo, identifica en el texto dos maneras de referirte a un hecho histórico.
“La Revolución Mexicana fue un conflicto armado que dio inicio en México el 20 de noviembre de 1910.
Los antecedentes de este movimiento revolucionario se remontan a la situación de México bajo la dictadura conocida como el Porfiriato.”
Hecho se repite, pero con diferentes palabras: “la Revolución Mexicana” y “movimiento revolucionario”. El texto anterior se refiere a un mismo hecho, pero de maneras diferentes. Es decir, podemos referirnos a algo o expresar una idea o concepto de diversas maneras, sin que se pierda su sentido original.
Como pudiste observar en los tres ejemplos anteriores, existen diferentes maneras para nombrar situaciones, objetos, personajes, características, ideas o hechos, sin ser repetitivos. Saber esto y poder utilizarlo, te ayuda a comprender mejor los textos a los que te enfrentas; a darle sentido y dinamismo a tus escritos, y no sólo eso: también a ampliar tu vocabulario y capacidad de expresarte.
Si vas a escribir un texto sobre los caballos, por ejemplo, te conviene tener a la mano varias palabras o frases para referirte a ellos, como “equinos”, “animales”, “cuadrúpedos” o “mamíferos”, y si vas a leer un texto, entonces debes saber que el autor probablemente usará palabras distintas para referirse a un mismo personaje, objeto o situación.
Es importante que sepas que puedes usar formas distintas para referirte a un mismo personaje, objeto o situación. Por eso es importante tener claro que existen diferentes maneras de expresar situaciones, características, personajes u objetos en un texto; y que éstas ayudan para no repetir los términos en una redacción.
Para que quede más claro, te presentamos los siguientes dos textos:
¿Qué diferencias encuentras entre ambos?
El primer texto usa diferentes términos para referirse al Sol, por lo que la lectura es mucho más clara que en el segundo texto. El segundo repite la palabra “Sol” tres vece eso lo vuelve cansado y tedioso.
Veamos qué opciones utilizó:
El Sol es centro de atención de los científicos desde hace muchos años.
Los rayos que nos transmite esta estrella dan algo más que luz.
Además, este lucero es el centro de nuestro sistema solar.
Si pones atención, verás que no solamente se utilizan términos distintos cuando se refiere directamente al Sol, sino que también se hizo al mencionar sus características.
Te invitamos a que escribas dos maneras diferentes para referirte a las características del Sol. Por ejemplo:
- El Sol es centro de atención de los científicos.
- Este lucero es el centro de nuestro sistema solar.
Cuando un concepto es relevante dentro del texto, suele repetirse, y si usáramos las mismas palabras, la lectura se volvería lenta y cansada. De ahí la importancia de identificar diversas maneras de nombrar situaciones, objetos, personajes o características en tus textos.
Para que quede más claro ahora harás una retroalimentación y conocerás nuevos conceptos. Pon mucha atención.
Los elementos que se pueden sustituir en un texto son:
- Situaciones,
- objetos
- y personajes.
Las situaciones se refieren a los hechos, acontecimientos o sucesos que se encuentran en un texto (puede ser científico, literario o de cualquier índole), y que, a su vez, se mencionan de varias maneras.
O también el descubrimiento de algo, al cual se puede hacer referencia como innovación o hallazgo, por nombrar un par.
Los objetos son todas aquellas cosas que carecen de vida y ostentan una forma definida, y que se presentan en un texto (puede ser científico, literario o de cualquier índole), además, pueden estar mencionadas de diferentes maneras.
Finalmente, los personajes se refieren a las diferentes formas de mencionar a un personaje en un texto (como en una biografía), ya que el autor de un texto puede utilizar una gran diversidad de expresiones para mencionar al personaje.
Como te pudiste dar cuenta, es muy importante que, al leer un texto, aprendas a identificar las diversas maneras en que se mencionan algunas palabras o expresiones, con la finalidad de que tú y cualquier lector comprenda, a lo largo de la lectura, las características y el sentido de lo dicho. Pero no solamente como lectora o lector debes identificar estas maneras de abordar ciertas ideas, sino también como escritora o escritor. Es muy importante que, al momento de redactar un escrito para compartirlo con otras personas, utilices distintas formas de referirte a lo mismo, para que tu comunicación sea efectiva sin resultar repetitiva ni aburrir al lector.
Es muy importante que seas capaz de utilizar y reconocer diferentes expresiones en un texto, ya que esto te ayudará a entender mejor la lectura y también a redactar de manera clara, sencilla y correcta, sin hacer uso de repeticiones.
Pon mucha atención a la siguiente actividad y trata de identificar en el texto las diferentes formas que se usan para nombrar al personaje.
“Thomas Alva Edison. Thomas Alva Edison, el menor de cuatro hermanos, nació el 11 de febrero de 1847 en Milan, Ohio, una pequeña población en la que se había establecido su padre, Samuel Edison, seis años antes. Su padre tuvo que abandonar precipitadamente Canadá a consecuencia de una rebelión contra los ingleses en la que tomó parte y que terminó en fracaso. Marginada por el ferrocarril, la actividad en Milan fue disminuyendo poco a poco, y la crisis afectó a la familia Edison, que tuvo que emigrar de nuevo a un lugar más próspero cuando su hijo Thomas ya había cumplido la edad de siete años.
El nuevo lugar de residencia fue en Michigan, donde el futuro inventor asistió por primera vez a la escuela. Fue ésa una experiencia muy breve: duró sólo tres meses, al cabo de los cuales fue expulsado de las aulas, alegando su maestro que le faltaba absoluto interés y una torpeza más que manifestaba, comportamientos éstos a los que no era ajena una sordera parcial que contrajo como secuela de un ataque de escarlatina.
Su madre, Nancy Elliot, que había ejercido como maestra antes de casarse, asumió en lo sucesivo la educación del joven benjamín de la familia, tarea que desempeñó con no poco talento, ya que consiguió inspirar en él aquella curiosidad sin límites que sería la característica más destacable de su carrera a lo largo de toda su vida.”
¿Pudiste identificar las diferentes formas que usó el autor para referirse a este famoso inventor?
El texto anterior habla de un inventor norteamericano cuyo nombre completo es Thomas Alva Edison; sin embargo, a lo largo del texto se utilizaron diferentes sustantivos y calificativos para referirse a él, tales como:
- Thomas Alva Edison: indica su nombre completo.
- Thomas: manera sencilla de decir sólo su nombre.
- Futuro inventor: refiere a lo que llegaría a ser.
- Joven benjamín: se usa para referirse al hijo menor de una familia.
Además, también para referirse a la “escuela” se usó el término “aulas”, para no repetir palabras.
Ahora te presentamos otra lectura sobre un acontecimiento social que inició en el año de 1910 en nuestro país. Pon atención a las expresiones que están subrayadas, para que al finalizar el texto reflexiones sobre la razón por la cual se encuentran señaladas.
“Revolución Mexicana. El domingo 20 de noviembre de 1910, desde las seis de la tarde, iniciaba el levantamiento armado convocado por Francisco I. Madero para poner fin al gobierno de Porfirio Díaz, y establecer elecciones libres y democráticas…
En su libro Breve Historia de la Revolución Mexicana, el político y académico Jesús Reyes Heroles (1892-1985) subrayó que, efectivamente, la causa fundamental del gran movimiento social que transformó la organización del país en casi todos sus variados aspectos, fue la existencia de enormes haciendas en manos de unas cuantas personas con mentalidad conservadora o reaccionaria…”
Secretaría de Gobernación, México, 19 de noviembre de 2018. Adaptación Erik Ruíz Esstiga
Como pudiste observar en el texto que acabas de leer y que se refiere a un hecho histórico, al momento de referirse a la expresión “Revolución Mexicana”, el autor del texto utilizó las expresiones:
Ya revisaste textos donde se mencionan diversas maneras de referirse a situaciones y a personajes o características. Ahora te presentaremos un ejemplo de objetos.
Para ello, te invitamos a realizar un último ejercicio en donde podrás identificar las diferentes maneras de referirse a un objeto y también aprovecharás para completar sus características.
“La tierra. El planeta es grande y extenso, y se distingue de los restantes porque posee agua y una atmósfera rica en oxígeno y nitrógeno, dos factores indispensables para la aparición de la vida.
El interior del globo terrestre está estructurado en tres capas de distinto grosor y composición.
El orbe es muy extenso y se desplaza alrededor del Sol.”
¿Pudiste identificar las diversas formas que se usaron para nombrar a la Tierra?
En este ejemplo se utilizaron las expresiones:
Además, otros términos para describir sus características.
Puedes encontrar o utilizar diferentes maneras para nombrar hechos, como el ejemplo anterior que menciona un suceso ocurrido en nuestro país, la Revolución Mexicana. También nos sirven para nombrar a personajes, como pudiste notar al momento de leer la biografía de Thomas Alva Edison, en donde, de igual manera, se utilizaron diversas formas para referirse al mismo personaje. Finalmente, se puede apelar a distintos términos también para nombrar objetos y características.
Recapitulando:
- Revisaste que en el lenguaje es común que haya diversas maneras de referirnos a ciertos conceptos.
- Repasaste los elementos que se pueden sustituir en un texto: situaciones, objetos, personajes.
- Leíste textos para identificar diversas maneras de nombrar situaciones, objetos, personajes o características.
Puedes apoyarte en tu libro de texto de Lengua Materna, en donde seguramente encontrarás más actividades para reforzar este conocimiento.
El reto de hoy:
Ten a la mano el texto que escribiste como resultado de tu investigación. Léelo con calma y determina qué objetos, personajes o situaciones se repiten, e indaga de qué otras maneras los puedes mencionar.
Después de que lo hayas hecho, comparte tu texto con tus familiares y amigos, y por qué no, también con tus compañeros de clase, con la finalidad de que valoren que la redacción es clara.
¡Buen trabajo!
Gracias por tu esfuerzo.
Para saber más:
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