De amor, muerte y otros temas
De amor, muerte y otros temas
Aprendizaje esperado: lee y compara poemas de diferentes épocas sobre un tema específico.
Énfasis: explorar poemas sobre un tema específico.
¿Qué vamos a aprender?
En esta sesión explorarás poemas sobre un tema específico.
Ten listo tu cuaderno, lápiz o pluma; así como tu libro de texto para que amplíes la información.
¿Qué hacemos?
Tal vez, te ha sucedido que hay días en donde despiertas con mucho entusiasmo por la vida, pues piensas que has venido a ella para disfrutarla. Pero, también hay veces que piensas que la vida tiene momentos no muy gratos. A través de los siglos han existido situaciones difíciles, como la presencia de enfermedades, como la que se está viviendo; pero también han existido las guerras, las catástrofes, desgracias que afectan a toda una nación o al mundo entero.
Todas las personas son un cúmulo de vivencias y de aprendizajes positivos y negativos, un cúmulo de preocupaciones que surgen de la vida cotidiana y que los mantienen ansiosos la mayor parte de su vida.
¿Y sabes una cosa?
Se vale voltear a tu interior, donde habitan tus sentimientos más profundos, y preguntarte ¿cómo quieres vivir?, ¿de qué manera quieres vincular tu alma y tus más profundos deseos a la vida?
Todos los seres humanos, son maravillosos, misteriosos y sensibles; absolutamente todos sienten, lloran y ríen.
Hay que dejar a un lado en esta sesión tu ser crítico y analítico, y debes centrarte en el ser humano, que ha venido a este mundo a conocer sus sentimientos más profundos; a sentir dolor, alegría, gozo.
Ya se ha mencionado anteriormente que todas las personas tienen sensibilidad. El ser humano se caracteriza por eso también. Es un aspecto que se tiene escondido como un cofre en tu corazón, y que, además, a través de los siglos, siempre ha existido de diversas maneras.
Sabes que existen hombres y mujeres dentro del ámbito literario que además de escribir todo tipo de narraciones, también han expresado sus más profundos sentimientos ante la vida por medio de la poesía.
En esta sesión, lo que se quiere, es lograr abrir ese cofre en ti, explorando algunos poemas que se han escrito a través del tiempo, y que hablan de la vida misma, de cómo se siente vivir, ¿qué te parece?
Hay que explorar cómo a través de la literatura, específicamente de la poesía, los escritores han traspasado más allá de las palabras todas las emociones existentes en las personas, y han hecho de lo cotidiano algo verdaderamente mágico, ¿te parece?
¡Explota tus emociones contenidas junto con ellos!
¿Sabes desde cuándo apareció la poesía?
Desde que el ser humano habita este planeta. La poesía se ha manifestado desde hace mucho tiempo. Los poetas que son más conocidos datan de siglos atrás: los griegos en el siglo Vll antes de esta época, e incluso de tus antepasados, los antiguos mexicanos, no fueron la excepción.
Está documentado que, en el México prehispánico, ya había poemas líricos, que son aquellos donde el poeta canta sus propios sentimientos, utiliza un lenguaje emocional y proyecta un estado afectivo ante la vida, tomando en cuenta también el contexto histórico que se vivía en esa época.
La poesía ha evolucionado y se ha manifestado hasta la actualidad, lo que se llama: poesía contemporánea. Para empezar, se compartirá un fragmento del poema “No entres dócilmente en esa buena noche” del poeta británico Dylan Thomas, que dice así:
No entres dócilmente en esa buena noche,
Que al final del día debería la vejez arder y delirar;
Enfurécete, enfurécete ante la muerte de la luz.
Aunque los sabios entienden al final que la oscuridad es lo correcto,
Como a su verbo ningún rayo ha confiado vigor,
No entran dócilmente en esa buena noche.
Llorando los hombres buenos, al llegar la última ola.
Por el brillo con que sus frágiles obras pudieron haber danzado en una verde bahía,
Se enfurecen, se enfurecen ante la muerte de la luz.
Hasta aquí el poema.
Al leer este poema se siente la fugacidad de la existencia, lo pequeños que son los seres humanos, ante la eternidad y la muerte, el dolor que ocasiona el tener que aceptar que todo debe terminar.
Te fijaste cómo, aunque se mencionen o se vislumbren en el poema aspectos que podrían parecer negativos como la muerte y la negación, la forma de expresarlo dice y transmite mucha emocionalidad.
Ahí, está lo verdaderamente importante cuando lees o escuchas poesía: sentir más que comprender, disfrutar más que analizar, dejar que toda esa emocionalidad guardada en tu cofre, brote.
Debes dejarte llevar por la emoción a la hora de leer o escuchar poesía: como cuando escuchas una canción que te gusta mucho y que te puede poner feliz o triste, pero de la misma manera la disfrutas.
Así es, la poesía, como las canciones, también te hablan sobre lo que se concibe como el bien y el mal, la lealtad y la traición, la promesa y el compromiso, el amor y el desamor, la vida y la muerte. Todas las emociones y sentimientos que de una u otra manera están presentes a lo largo de tu existencia; y, por supuesto, que tiene que ver con lo que vives en el momento.
Ahora, lee un poema del escritor uruguayo Mario Benedetti.
“Por siempre”
Si la esmeralda se opacara,
si el oro perdiera su color,
entonces, se acabaría
nuestro amor.
Si el sol no calentara,
si la luna no existiera,
entonces, no tendría
sentido vivir en esta tierra
como tampoco tendría sentido
vivir sin mi vida,
la mujer de mis sueños,
la que me da la alegría…
Si el mundo no girara
o el tiempo no existiese,
entonces, jamás moriría.
Jamás morirías
tampoco nuestro amor…
pero el tiempo no es necesario
nuestro amor es eterno
no necesitamos del sol
de la luna o los astros
para seguir amándonos.
Si la vida fuera otra
y la muerte llegase
entonces, te amaría
hoy, mañana…
por siempre…
todavía.
Hasta aquí el poema.
Tomando en cuenta el propósito de este contenido, y el poema de Dylan Thomas, habías captado que se está abordando el tema de la vida y la muerte, tema que no se percibía del todo en este poema, pero puedes ver que hay otros temas ligados, como el amor, que es parte fundamental de la existencia.
¿Qué te transmite?
Te puede transmitir nostalgia, soledad, pero también ganas de vivir y de amar. Ahora sí, estás entrando en el terreno de las emociones. Como verás, es sorprendente que existan tantos poetas y poetisas que hablen del mismo tema, pero a la vez, no de lo mismo.
Es importante expresar con tus propias palabras, aunque creas que esas palabras no te alcancen; porque aquello que no puedes explicar, lo estás sintiendo. Un poema tiene tantas lecturas como momentos de sus posibles lectores, como circunstancias vitales, que se pueden reflejar en relación con el texto y lo que sugiere. La lectura de un poema puede convertirse en una aventura hacia formas de sentir y de expresar nuevas y desconocidas para ti.
No necesariamente otra persona puede sentir lo mismo que tú sientes, ni viceversa. Esa es la magia de los poemas. Aunque las personas se emocionen de distintas maneras, todos sus sentires son importantes.
Ahora se continuará. con un poema del escritor nacionalizado estadounidense, Charles Bukowski, que se titula:
El corazón ríe.
Tu vida es tu vida
no dejes que sea golpeada contra la húmeda sumisión
mantente alerta
hay salidas
hay una luz en algún lugar
puede que no sea mucha luz pero
vence a la oscuridad
mantente alerta
los dioses te ofrecerán oportunidades
conócelas
tómalas
no puedes vencer a la muerte pero
puedes vencer a la muerte en la vida, a veces
y mientras más a menudo aprendas a hacerlo
más luz habrá
tu vida es tu vida
conócela mientras la tengas
tú eres maravilloso
los dioses esperan para deleitarse
en ti.
Hasta aquí el poema.
A uno de tus compañeros este poema, lo hizo sentir minúsculo, pero a la vez, especial ante la vida, ante su vida. Como ver las cosas desde su óptica. Asimismo, comentó que es difícil describir con palabras lo que sentía.
Los poetas también lo hacen, escriben lo que sienten, pero sin importarles las palabras con sentido exclusivamente literal o absolutista.
Tal vez, no te hayas acercado mucho a la poesía porque te preocupaba no entenderle; pero como puedes ver, se trata más de sentir. Cada quién tiene su propia visión al escuchar un poema; cada persona tiene una percepción distinta de las cosas.
Puede ser que una persona tenga una visión más romántica de las cosas; entonces verá la grandiosidad del ser humano también en sus ideales, en la lucha que enfrenta día a día para salir adelante.
Tu forma de sentir tiene que ver con tu edad, tus vivencias, con un instante de sensibilidad, etc.
Por ejemplo: ¿cómo te sientes después de recibir un regaño, una llamada de atención; cuando recibes un regalo, o cuando te encuentras solo o sola en casa; cuando el clima es frío o hace calor; o en esta etapa de tu vida llamada adolescencia?
Como se mencionó al principio de esta sesión, las personas son un cúmulo de emociones y sentimientos.
Ahora, hay que seguir explorando la poesía contemporánea, encaminada con respecto a tu forma de sentir; a lo que ves cuando pasa la vida frente a tus ojos, sin ningún filtro. Vas a explorar algunos autores que han sido galardonados con el premio Nobel de literatura.
Por ejemplo, Thomas Stearns Eliot, poeta de origen estadounidense, que ganó el premio en el año de 1948.
Lee el siguiente fragmento del poema llamado:
“Rapsodia de una noche de viento”
Las doce.
A lo largo de los cauces de la calle
sostenidos en síntesis lunar,
susurrando encantamientos lunares,
se disuelven los suelos de la memoria
y todas sus claras relaciones,
sus divisiones y precisiones,
cada farol que dejo atrás
resuena como un tambor fatalista,
y a través de los espacios de lo oscuro
la medianoche sacude la memoria
como un loco agitando un geranio muerto.
La una y media,
el farol rociaba,
el farol mascullaba,
el farol decía: “Observa a esa mujer”
que vacila hacia ti en la luz de la puerta
que se abre hacia ella como una mueca.
Ves que el borde de su vestido
está desgarrado y sucio de arena,
y ves que el rabillo del ojo
se le retuerce como un alfiler torcido
Hasta aquí el poema.
Ahora, se realizará una actividad. A partir de los fragmentos de los poemas, tú, irás anotando en tu cuaderno los siguientes aspectos:
- ¿Qué sensaciones o emociones te provoca el poema?
- ¿Es posible relacionarlo con vivencias personales y sentimientos que hayas experimentado?
- ¿Qué imágenes te llegan a tu mente, qué colores?
- ¿Qué canciones te sugiere la lectura del poema?
Sólo eso, no hay más, sólo disfrutar, imaginar y sentir el momento. Es una buena idea, pocas veces lo haces, sin analizar, sólo sentir.
Por ejemplo, se le preguntó a tu compañera Elena, ¿qué imagen o imágenes le vinieron a la mente con el fragmento que se acaba de leer?
Ella contesto, lo siguiente:
El barrio en donde nací y crecí. El farol a lo lejos; y yo observando cada detalle de lo que hacían los vecinos.
Asimismo, se le pregunto: ¿qué sintió?
Ella respondió:
Nostalgia, ganas de volver a estar sentada en el zaguán de mi vecindad, a veces alegre con las peripecias de mis amigas; a veces triste por alguna noticia recibida; llena de los olores y sabores de mi barrio.
Con el poema de “Rapsodia de una noche de viento”, ella rememora algunas noches y todo lo que se vivía y se sentía en ellas. Creyó que ya no estaba ante un poema que reflejara el tema de la vida y la muerte, pero está en la nostalgia que sintió; en las ganas de volver a vivir eso.
Como pudiste ver en el ejemplo de tu compañera Elena, a ella la lectura la remitió al pasado, a su niñez, pero sobre todo la hizo sentir, volver a disfrutar de esos momentos, volver a olerlos y saborearlos.
Te fijas que realmente para disfrutar de un poema, no necesariamente tienes que ser experto o conocedor erudito en el tema. Sólo es dejarte llevar por la emoción, y esa emoción proviene de lo ya vivido, de lo que está guardado en tu cofre.
Con lo mencionado, sobre los momentos, hay una canción del músico y ganador del premio nobel de literatura, Bob Dylan, “Forever Young”.
Lee el siguiente fragmento de la canción traducida al español.
Que crezcas para ser virtuoso,
que crezcas para ser auténtico
que siempre conozcas la verdad
y veas la luz que te rodea.
Que seas siempre valiente
seas firme y fuerte,
que permanezcas por siempre joven,
por siempre joven, por siempre joven,
que permanezcas por siempre joven.
Que tus manos siempre estén ocupadas
que tus pies siempre sean veloces
y que tengas una fuerte base
para cuando el viento cambie de golpe
que tu corazón siempre esté alegre
que tu canción sea siempre cantada
que permanezcas por siempre joven,
por siempre joven, por siempre joven,
que permanezcas por siempre joven.
Ahora, lee otro poema, este es de William Buttler Yeats, ganador del premio Nobel en 1923, poeta irlandés.
“La rueda.”
A través del invierno invocamos la primavera,
toda la primavera llamamos al verano,
y cuando ya resuenan los setos rebosantes
declaramos que lo mejor es el invierno.
Y después nada hay bueno
porque la primavera no ha venido.
No sabemos que aquello que perturba nuestra sangre
es sólo su nostalgia de la tumba.
Éste es un poema muy cortito. ¿Qué imágenes y sentimientos te evoca?
Como puedes ver, éste está como más profundo, porque es la forma en que puedes ver pasar la vida: siempre a prisa, siempre ansiando que se acabe una cosa para empezar otra; como hace mención el título, como una rueda.
Dicen por ahí, que vivir de prisa no es vivir, es sobrevivir, y esa frase está llena de razón, cada momento de tu preciada existencia lo tienes que vivir conscientemente, disfrutarla al máximo, porque el tiempo pasa.
Al leer lo anterior tal vez recuerdes una canción de José María Napoleón, titulada “Vive”, que dice así:
Nada te llevarás cuando te marches.
Cuando se acerque el día de tu final.
Vive feliz ahora mientras puedes.
Tal vez mañana no tengas tiempo.
Para sentirte despertar.
Siente correr la sangre por tus venas.
Siembra tu tierra y ponte a trabajar.
Deja volar libre tu pensamiento.
Deja el rencor para otro tiempo.
Y echa tu barca a navegar.
Hasta aquí la letra de esta canción.
A continuación, revisarás otro poeta, Octavio Paz, mexicano y premio Nobel en el año de 1990, que murió 8 años después de recibirlo. Disfruta el siguiente poema.
La vida sencilla.
Llamar al pan y que aparezca
sobre el mantel el pan de cada día;
darle al sudor lo suyo y darle al sueño
y al breve paraíso y al infierno
y al cuerpo y al minuto lo que piden;
reír como el mar ríe, el viento ríe,
sin que la risa suene a vidrios rotos;
beber y en la embriaguez asir la vida,
bailar el baile sin perder el paso,
tocar la mano de un desconocido
en un día de piedra y agonía
y que esa mano tenga la firmeza
que no tuvo la mano del amigo;
probar la soledad sin que el vinagre
haga torcer mi boca, ni repita
mis muecas el espejo, ni el silencio
se erice con los dientes que rechinan:
estas cuatro paredes, papel, yeso,
alfombra rala y foco amarillento?
no son aún el prometido infierno;
que no me duela más aquel deseo,
helado por el miedo, llaga fría,
quemadura de labios no besados:
el agua clara nunca se detiene
y hay frutas que se caen de maduras;
saber partir el pan y repartirlo,
el pan de una verdad común a todos,
verdad de pan que a todos nos sustenta,
por cuya levadura soy un hombre,
un semejante entre mis semejantes;
pelear por la vida de los vivos,
dar la vida a los vivos, a la vida,
y enterrar a los muertos y olvidarlos
como la tierra los olvida: en frutos…
Y que a la hora de mi muerte logre
morir como los hombres y me alcance
el perdón y la vida perdurable
del polvo, de los frutos y del polvo.
Este poema hace valorar los detalles insignificantes de la vida cotidiana, como el despertar, darse un baño, desayunar, salir y ver a los amigos. Que la vida sencilla, así como llega, es la única conexión con los otros y contigo mismo.
A tu compañero Sergio, este poema le recordó a su abuelo, que siempre decía que a esta vida se viene a dar por el simple placer de hacerlo; y a vivir de la manera que nosotros queramos, siendo coherentes con nuestros ideales.
Con relación a lo anterior hay una canción que se llama: “Celebra la vida” y dice así:
No sé si soñaba,
No sé si dormía,
Y la voz de un ángel
Dijo que te diga:
Celebra la vida.
Piensa libremente,
Ayuda a la gente,
y por lo que quieras
Lucha y sé paciente.
Lleva poca carga
A nada te aferres
Porque en este mundo,
Nada es para siempre.
Búscate una estrella
Que sea tu guía,
No hieras a nadie
Reparte alegría.
Como verás, es una bella canción, se espera que hayas disfrutado explorando poemas sobre un tema específico, que en este caso fue la vida y la muerte.
Recuerda que la vida es una poesía, en la que te puedas sentir triste, alegre, nostálgico, enamorado; odiar al mismo tiempo que amar, y que es en la lectura de ésta, donde puedes encontrar reflejados tus sentimientos más profundos.
Así que, se espera que sigas explorando poesía y te des el permiso de vivir sintiendo.
Los sentimientos que se desprenden de la poesía son además sentimientos que tal vez no tenías muy conscientes, por ejemplo, la lectura de muchos de estos poemas te pudo hacer recordar aspectos de tu vida que tenías olvidados.
En la poesía muchas veces se escurre la nostalgia del poeta, y esa nostalgia suele o puede afectarte de manera particular, aunque la poesía exprese la manera personal en la que el poeta o la poetisa observa o vive el mundo y sus circunstancias, estos se vuelven universales por qué expresan a través de sus metáforas sentimientos que todas las personas viven o situaciones que todas pueden observar.
También has visto que la poesía no sólo se encuentra en los poemas, sino también en la música. Así es, leíste la letra de grandes cantautores que han combinado la poesía con la música.
Pudiste comprobar que, aunque haya autores de diferentes épocas o contextos sociales, culturales, políticos, ideológicos y de diferentes lenguas: el lenguaje de la poesía es universal y tan antiguo como los sentimientos. Porque como decía algún poeta: “Lo que realmente distingue al hombre del resto de los animales es su capacidad de hacer poesía”.
El reto de hoy:
Revisa y sigue las sugerencias contenidas en tu libro de texto, referentes al aprendizaje esperado y propone a tu profesora o profesor de esta asignatura, una sesión con tus compañeros, en donde disfruten expresar sus emociones a través de la poesía.
¡Buen trabajo!
Gracias por tu esfuerzo.
Para saber más:
Lecturas