Tomamos decisiones sencillas y complejas

 

Tomamos decisiones sencillas y complejas

Aprendizaje esperado: reflexiona acerca de su capacidad para tomar decisiones libres con base en el respeto, aprecio y cuidado por la dignidad propia y de otras personas en situaciones escolares y comunitarias.

Énfasis: reconoce que todas las personas en su vida cotidiana realizan múltiples elecciones, algunas más sencillas otras más complejas.

¿Qué vamos a aprender?

Reflexionarás acerca de tus capacidades para tomar decisiones libres con base en el respeto, el aprecio y el cuidado por la dignidad propia y de otras personas en situaciones escolares y comunitarias.

Recuerdas la sesión pasada, que se hablaba de tener una vida digna. ¡Recordemos un poco más!

Hay situaciones que hacen más difícil que tengamos una vida digna, y que también hay otras que ayudan a satisfacer nuestras necesidades básicas, y que nuestros familiares (principalmente mamá y papá), vecinas y vecinos, autoridades e instituciones, deben hacer lo posible para garantizar que nuestra vida sea digna.

Y que vivir en pobreza, sufrir violencia, no poder estudiar o no tener la oportunidad de opinar nos impide tener una vida digna. Por eso, para algunas familias que viven en condiciones de pobreza, emigrar les permite acercarse a servicios que van a ayudarles a hacer que su vida sea más llevadera y sus necesidades básicas estén mejor atendidas.

Deberás reflexionar, que todos nosotros, y las demás personas, somos capaces de tomar nuestras propias decisiones y aunque algunas son sencillas, hay otras que son un poco más difíciles de elegir.

Por ejemplo: Lee con atención lo que comenta Panchito y Luis.

Luis: Yo recuerdo cuando era más pequeño, mi mamá y mi papá siempre me permitieron tomar mis propias decisiones. En ese momento no me era tan difícil elegir qué hacer, pero conforme uno va creciendo se vuelve más difícil tomar las decisiones en diferentes situaciones.

Panchito: Yo también tomo mis propias decisiones, por ejemplo, yo decido lo que pienso, lo que quiero decir, cantar, expresar, cómo vestirme, o qué cuentos quiero leer o me cuenten, también si quiero o no ir a visitar a alguien o con qué juguetes jugar.

Como puedes ver, las decisiones que tanto Panchito y Luis y hasta tú, pueden tomar por su cuenta, pero hay situaciones en las que es más difícil elegir entre una y otra opción, y son nuestras mamás, papás u otros familiares quienes las toman o nos orientan y ayudan a hacerlo.

Elegir una opción entre otras significa tener libertad, pero esta libertad implica asumir las responsabilidades que resultan de la elección que cada persona hace.

Por eso, es importante que, desde que somos pequeños o pequeñas, aprendamos a tomar decisiones, y que se nos oriente acerca de cómo hacerlo. Guiar a los niños y niñas para tomar decisiones consiste en que aprendan a analizar la situación y sus causas, a valorar las diferentes opciones disponibles, a reflexionar sobre las consecuencias, a escucharse y, en su momento, a decir que No. en todos los casos, con respeto a la dignidad, integridad y derechos propios, así como la dignidad, la integridad y los derechos de otras personas.

No debes tomar decisiones apresuradas. También es importante ser conscientes de que cuando se toma una elección no tienes que dañar a nadie.

Para algunas niñas y niños, estar en una situación en la que se tiene que elegir entre varias opciones es una experiencia nueva y, a veces, muy emocionante, ya que en ocasiones no tienen la experiencia previa en sus vidas, es la primera vez que eligen por sí mismos.

E Incluso, a las personas mayores, les causa emoción tomar decisiones, pero se tiene que estar muy tranquila/o para poder elegir la mejor opción. Pensar siempre en las responsabilidades que conlleva cada una de las opciones.

Para tratar más a fondo el tema, Lee con atención el siguiente cuento y después reflexiona.

Cuento de los tres cerditos y el lobo feroz

En el bosque, vivían tres cerditos, que decidieron hacer sus casas para protegerse del lobo.

El primer cerdito, decidió hacer una casa de paja. En pocos minutos, la choza ya estaba hecha y entonces se fue a dormir.

El segundo cerdito, prefirió hacer la cabaña de madera, no tardó mucho en construirla y se fue a comer manzanas.

El tercer cerdito, prefirió construir una casa de ladrillos y cemento.

Fue el que más tardó en construirla, pero era la más segura. Después de un día de mucho trabajo, la casa quedó lista.

De pronto, en el bosque, se escucharon los aullidos del lobo, que se acercaba a las casas de los tres cerditos. Hambriento, el lobo se dirigió a la primera casa y dijo:

– ¡Ábreme la puerta! ¡Ábreme la puerta o soplaré y tu casa tiraré!

Como el cerdito no le abrió, el lobo sopló y derrumbó la casa de paja. El cerdito, temblando de miedo, salió corriendo hacia la casa de madera de su hermano.

El lobo le siguió. Y delante de la segunda casa, llamó a la puerta, y dijo:

– ¡Ábreme la puerta! ¡Ábreme la puerta o soplaré y tu casa tiraré!

Pero el segundo cerdito tampoco le abrió y el lobo soplo y soplo, y la cabaña voló. Asustados, los dos cerditos corrieron y entraron en la casa de su otro hermano.

Pero, como el lobo estaba decidido a comérselos, llamó a la puerta y gritó:

– ¡Ábreme la puerta! ¡Ábreme la puerta o soplaré y tu casa tiraré!

Y el cerdito le dijo:

– ¡Sopla lo que quieras, pero no te abriré!

Entonces el lobo sopló y sopló. Y volvió a soplar con todas sus fuerzas, pero la casa ni se movió. La casa era muy fuerte y resistente, el lobo se quedó casi sin aire.

Pero, aunque el lobo estaba muy cansado, no renunció en su plan.

Consiguió una escalera, subió al tejado de la casa y se metió por la chimenea. Estaba empeñado en entrar en la casa y comerse a los tres cerditos, pero lo que él no sabía es que los cerditos pusieron en la chimenea, una olla con agua hirviendo.

Y el lobo, al bajar por la chimenea, se quemó la cola con el agua caliente. ¡Dio un enorme grito y salió corriendo!

El lobo no volvió nunca más, y así los cerditos pudieron vivir tranquilamente.

  • ¿Qué te pareció? ¿Ya conocías este cuento?
    Vamos a analizarlo con más detenimiento. ¿Qué aprendizaje te deja esta historia?
    Contesta las preguntas:
  • ¿Los tres cerditos tuvieron la misma oportunidad de elegir la calidad y en qué tiempo construir su casa?
    Sí, de hecho, ellos decidieron los materiales que ocuparían para construirla.
  • ¿Por qué consideran ustedes que hubo dos casas que el lobo pudo destruir rápidamente y otra no?
    Porque el primer cerdito quiso trabajar poquito, el segundo cerdito quiso trabajar más o menos y el tercer cerdito sí invirtió más tiempo a la construcción de su casita y le quedó fuerte y bonita, y ¡el lobo al soplar, no la pudo tirar!
  • ¿Qué aprendizajes te deja este breve cuento? Lee muy bien las respuestas anteriores y piensa en la situación, reflexiona y anota las respuestas en tu cuaderno.
    Panchito también contesto la pregunta lee con atención:
    ¿Qué aprendizajes te dejó el cuento de los tres cerditos?
    Panchito: Que hay situaciones en las que todas y todos tenemos la misma posibilidad de elegir, es decir tomar nuestras propias decisiones, pero siempre tenemos que pensar en las consecuencias de nuestros actos.
    Cada día todas las personas tomamos decisiones, elegir entre opciones forma parte de nuestra vida. Ya hemos visto que estas elecciones van formando nuestro futuro, desde aquellas que se hacen de manera habitual como decidir cómo vestirnos, qué comer, con qué jugar, y otras que son más complejas, como elegir un representante de equipo o del grupo, qué vamos a estudiar de grandes, en dónde viviremos o en qué vamos a trabajar cuando seamos adultos, entre otras.
    ¿Qué hacemos?
    Como puedes ver son muchas responsabilidades. Pero también ser responsable puede ser divertido. Dependiendo de qué tan bien hayamos pensado lo que decidamos hacer, más satisfactorio será el resultado.
    Ahora bien, para eso, tenemos que preguntarnos lo siguiente: ¿cómo sabemos si tomamos o no buenas elecciones?
    Reflexionando antes de actuar o elegir, es decir, hay que analizar la situación, sus causas y las alternativas para resolverla, así como pensar qué podría pasar al elegir una opción.
    Saber qué consecuencias podría tener cada decisión que tomamos.
    Y sin olvidar, nunca, el respeto de nuestra integridad y derechos, así como el respeto, la integridad y los derechos de las demás personas.
    ¡Vamos a jugar! Observa las estrellas, tienen escrita una frase. Esta frase es una situación, en la mesa se pondrán varias opciones, que serán las distintas decisiones que se pueden tomar para resolver las situaciones de las estrellas. Habrá dos opciones por cada situación. ¿Entendido

    Sí estoy jugando y pierdo el juego de futbol, ¿qué opciones tengo?
    Me esfuerzo más en los entrenamientos. Yo creo que esa es la opción adecuada. No tiene ningún sentido pelearme por algo que yo puedo resolver esforzándome más y poniendo atención a lo que quiero lograr.
    Entendiste muy bien las reglas del juego, piensa en diversas opciones que hay para resolver estas situaciones. Una más:

    ¿qué debo hacer?
  • Decirle a un adulto para que me lleve al médico …
  • Me tomo unas pastillas que están en casa para sentirme mejor.
    Tomar medicamentos sin que un doctor te lo diga puede ser realmente peligroso, no hay nada de emocionante en eso.
    Vamos a ver otra situación: un desconocido me pregunta mis datos. ¿Qué opciones tenemos?
  • Me alejo y se lo cuento a alguien de mi confianza.
  • Se los proporciono para conocernos.
    Los datos personales solamente deben ser utilizados para ciertas cosas y siempre para el bienestar propio. No hay que dar nuestros datos a personas desconocidas o que no les tengamos confianza.
    Una más: me toca lavar los trastes en casa. ¿Qué opciones se les ocurren que hay?
  • Puedo lavarlos e irme después a jugar.
  • Puedo dejarlos ahí y que los lave alguien más. Sin embargo, eso estaría afectando los derechos de otras personas. Colaborar en la casa es una tarea de todos, y no cuesta nada lavar los trastes y después, ya libre de tareas, ¡ir a jugar!

Es importante que tengamos claro que a cada situación le podemos encontrar dos o más opciones para enfrentarlas, pero que la correcta siempre será la que tenga como consecuencia beneficios, y no vaya en contra de nuestros derechos.

Por ejemplo: ¿qué harían si se encuentran un celular? O si empieza a llover y están en la calle.

O qué opciones hay si necesitas cruzar la calle.

O si ves que una persona de la tercera edad se cae, o si tu mamá te llama la atención. Para todo hay muchas salidas, pero hay que pensar muy bien cuál es la que uno va a tomar. ¿Qué decisiones tomaste?

Antes se pensaba que solo los adultos podían decidir por los niños y niñas. Afortunadamente, hoy en México y en muchas partes del mundo esta situación ha cambiado. Ahora se considera que las niñas y niños son capaces de tomar sus propias decisiones conforme van creciendo, y que esto es una capacidad que irán desarrollando. Pero se han preguntado, ustedes niños y niñas, aparte de las que acabamos de analizar en el juego, ¿cuáles otras elecciones pueden preferir ustedes?

¿Qué deben saber para tomar mejores decisiones?

¡Es muy fácil! Observa muy bien:

  • Participar y decir lo que cada uno y cada una piensa y siente.
  • Qué estudiar y a cuál oficio o profesión dedicarse.
  • A quién querer y amar.
  • Qué pasatiempo practicar.
  • A qué grupo de amigos pertenecer.
  • Qué vestimenta utilizar.

Estos son solamente algunos ejemplos, ya que son muchas elecciones las que pueden tomar las niñas y los niños en diferentes momentos y situaciones.

¿A qué nos referimos cuando decimos que podemos elegir participar y decir lo que sentimos?

A que si nosotros lo decidimos podemos expresar lo que pensamos sin que nos censuren, pero si elegimos no decir nada también lo deben de respetar.

  • Y sobre ¿qué estudiar y a qué dedicarse?
    Cada quien es responsable de elegir a qué se va a dedicar en la vida y qué es lo que quiere aprender.
  • Y ¿a qué nos referiremos con a quién querer y amar?

Cada persona siente a quién quiere y ama y se lo decimos; nadie nos puede obligar a sentir algo de cariño o amor por otra persona.

Y respecto a cuál pasatiempo practicar, es lo que nosotros elegimos hacer en nuestro tiempo libre. ¡Claro!, siempre y cuando no dañemos a nadie.

– ¿qué nos dices acerca de a cuál grupo de amigos pertenecer?

Pues muy sencillo, cada persona es libre de convivir con las personas con las que se sienta a gusto y que lo acepten. También se refiere a que no se debe cambiar o dejar de hacer lo que a uno le guste para que otras personas lo acepten.

Cada quien es capaz de elegir el tipo de vestimenta que va a usar. Puede ser casual, formal, cómoda, retro, roquera, y cualquier otra.

Sin embargo, hay que considerar que es importante consultar algunas decisiones con los adultos como mamá, papá, nuestro tutor o las personas que nos cuidan.

¿Qué aprendiste hoy?

Lo primero es que una decisión es elegir una opción entre varias. También, que niñas y niños tienen sus propias ideas, opiniones y emociones, que tienen derecho a expresar, pero pueden elegir cómo y cuándo expresarlas. Claro, siempre y cuando no impidan a otras personas tomar sus propias decisiones…

Además, que las elecciones que tomen las niñas y los niños merecen el mismo respeto que los adultos.

Es importante que la familia oriente a sus hijas e hijos para que, a medida que crecen, aprendan a elegir correctamente entre varias opciones.

Es importante que desde pequeños los niños y niñas tengan cierta autonomía y libertad para expresarse como son y para tomar decisiones en su vida cotidiana. Así́ se les demuestra que se les toma en cuenta y que los adultos somos sensibles a sus necesidades e intereses…

Recuerda platicar del tema de este día con tu mamá, papá, y otros familiares y niñas y niños que te rodean.

Si te es posible consulta otros libros para conocer más del tema.

¡Buen trabajo!

Gracias por tu esfuerzo.

Para saber más:

Lecturas

https://www.conaliteg.sep.gob.mx/

https://www.gob.mx/cms/uploads/attachment/file/533114/3o_Cuaderno_PNCE_2019.pdf

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